Dos días en Verona

…En esta hermosa ciudad, donde acaecieron estos amores, dos familias rivales igualmente nobles habían derramado, por sus odios mutuos, mucha inculpada sangre. Sus inocentes hijos pagaron la pena de esos rencores, que trajeron su muerte y el fin de su triste amor…

Romeo y Julieta, William Shakespeare

Y aunque he quitado el nombre de la ciudad del Prólogo, ya sabes sobre qué lugar te estoy hablando.

Estamos a 1 de Agosto y la carretera no presenta la tranquilidad de días anteriores, una vez cruzada la frontera el tráfico es mucho más denso.

Detalle importante: En Francia el peaje funciona prácticamente igual que en España. En Italia siempre que te incorpores a la autovía tendrás que sacar un ticket el cual tendrás que introducir en las cabinas de tu destino y es entonces cuando te cobrarán. No encontramos ningún peaje intermedio, solo en salida y destino. ¡¡¡Ten cuidado no te cueles por el Telepeaje…!!!

Y después de 5 horas aproximadamente llegamos a nuestro destino, 33ºC en el exterior, las chicharras cantan y ante nosotros una nueva aventura.

Conociendo Verona

Verona es una ciudad al norte de Italia, una de las más importantes del Veneto tiene unos 2000 años de historia, es atravesada por el rio Adigio y es mundialmente conocida por la obra de Shakespeare «Romeo y Julieta».

Dia 1

Lo primero que vamos a visitar son algunos de los restos de la época romana, no se si lo sabes, pero a nosotros nos encanta la historia de la antigua Roma, por lo que la primera parada no puede ser ni más ni menos que…. «La Arena de Verona», el anfiteatro romano mejor conservado del mundo. Actualmente en él se representan diferentes obras de ópera, si tienes ocasión no pierdas la oportunidad de vivir esta experiencia, nosotros no pudimos, pero queda apuntada para la próxima.

De la misma época son el «Arco de Gavi» y la «Puerta Borsari», esta última es preciosa a la par que interesante.

Y después de ver estas joyas de Verona toca disfrutar de una de las cosas que más nos gusta de Italia, un buen plato de pasta con un rico vino de la zona en la «Piazza Brà» con vistas a La Arena de Verona.

Ya cautivados con la ciudad, llega el momento de perdernos por sus calles.

El síndrome de Stendhal se cataloga como una enfermedad psicosomática que causa un elevado ritmo cardíaco, felicidad, palpitaciones…. cuando un individuo es expuesto a obras que son consideradas extremadamente bellas.

Esto es lo que sentimos al entrar en la «Piazza delle Erbe». Todas las ciudades de noche adquieren un plus de belleza, pero es cierto que esta plaza, antiguo foro romano, es de las que tienes que pararte, tomar asiento y pensar en todo lo que allí ha tenido que pasar. Justo al lado encuentras la «Piazza del Signori» y a continuación de está la «Piazzaletto delle Arche» con sus curiosas tumbas colgantes. No olvides abrir bien los ojos para encontrar el «huesto de ballena». Hora de descansar y por la mañana continuamos.

Día 2

Con las pilas cargadas toca seguir conociendo la ciudad, en este día intentaremos visitar:

• Corso Cavour. Va desde Porta Dei Bórsari (arco de entrada principal a la ciudad romana).
• Ponte di Pietra
• Restos del Teatro Romano
• Castelvecchio y el Ponte Scaligero (zona medieval).
• San Fermo Maggiore (desde aquí ver palacio Lavezola Pompei y la romana porta dei Leoni)
• Santa Anastasia
• Duomo Santa María Matricolare
• San Zeno Maggiore

En agosto en Verona hace calor, mucho calor, asi que no olvides el agua, eso si, fíjate bien en el color del tapón ya que las del tapón azul tienen gas y las del rosa no.

Y se que te estás preguntando, ¿No han ido a uno de los sitios más visitados de Verona?, pues si, fuimos. Aprovechamos el medio día para visitarlo, cuando pensamos que podía haber menos gente, y si, te estamos hablando de la «Casa di Guilietta». Creemos que es de estos lugares en los que casi siempre hay cola, asi que ten paciencia.

Y después de unos Gelatos, piadinas, pizza... llegamos al final de día. Para despedir un lugar tan bonito lo mejor es buscar una preciosa puesta de sol, y para ello en Verona puedes subir al «Castel San Pietro» y ver como según se va la luz del día, se encienden las luces de la ciudad como si de una obra de teatro se tratara.

Puede que en la obra de Shakespeare, Verona sea un lugar donde una historia de amor desemboca en una tragedia, pero la verdadera tragedia sería estar en Verona y no volver enamorado.

Zapatilla y Manta

Recomendación musical.